
Pepitos Bubblegum
Sobre estos pepitos
Este rosa chicle tiene algo especial: es alegre, juguetón y de los que te suben el ánimo con solo mirarlo. Tiene el color de un chicle recién abierto, de risas entre amigas, de uñas pintadas a última hora y de planes que acaban bien. El acabado mate le da ese toque cremoso que lo hace aún más apetecible.
Como todos nuestros Pepitos, forman parte de nuestro diseño más icónico, y están hechos a mano con mimo del bueno, del de verdad. El toque final lo pone el centro bañado en oro, grabado con nuestro sello, para que no quede duda: esto es una joyita con alma Pepita.
Ligeros, coquetos y con sabor a caprichito. Un rosa que no empalaga… y del que no te vas a cansar. En serio, los ves, los pruebas… y ya no quieres otros.